Ayer por fin tomé la decisión,
quizás una de las más importantes
y difíciles de mi vida...
Por fin decidí alejarme de ti,
decidí pedirte que me olvidaras,
que me borraras de tu vida,
que anularas nuestra amistad,
que cortaras el último nexo que nos unía...
Te confieso que no han pasado 24 horas
de esa petición y ya siento que me duele,
que me haces falta,
que extraño el sentirme libre de buscarte
que añoro la sorpresa que causaba en mi
un mensaje o una llamada tuya.
Pero digo ya no más,
ya no quiero estar allí para ti,
ya no quiero seguir esperando por ti,
ya no quiero seguir siendo tu amiga
cuando en realidad sueño con volver besar tus labios,
con volver a sentir tu cuerpo junto al mío,
con tus caricias y tus detalles.
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Quisiera regresar el tiempo
y parar la historia en nuestros días felices,
y parar la historia en nuestros días felices,
volver a asomarme a mi balcón
y saberte esperando por mi,
volver a escuchar tu voz decir
esas palabras dulces
que solo de tu boca me estremecen.
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Convertirme en tu amiga
me hizo enamorarte más y odiarte más;
enamorarme de las pocas virtudes que
no conocí de ti en nuestro idilio
y odiarte más por esos pequeños defectos
que conocí de ti durante nuestra amistad,
y aún así TE AMO MÁS que antes.
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Es difícil para mi alejarme,
pero creo que lo mejor es dejarme de engañar
pensando que algún día al verme frente a ti
me dirás que soy la mujer de tu vida,
me estamparás un beso
y me pedirás disculpas por la tardanza, (risas risueñas)
pero me temo que eso solo sucede en las novelas,
la vida real no es así...
Me descubro en ocasiones
buscándote en otros labios,
tratando desesperadamente
de encontrarte en otra piel,
y comparando
a cuanto Cristiano, Ateo, Judío o Budista
se cruza por mi camino,
y sé que eso no esjusto ni para ellos,
ni para mi, tengo que apartarte de mi presente
para poder merecer el futuro que deseo.
Por esto y muchas otras cosas más,
me dispongo dejarte pasar,
no sin antes recordarte que siempre pensaré en ti,
en lo especial que eres para mi,
en lo mucho que te amé,
y en que como de ti, nunca me enamoré.
Te quise, TE AMO y te recordaré SIEMPRE!
Sacerdotiza.
